Lluvias intensas ponen en jaque la movilidad en carreteras de Veracruz: advierten transportistas

Lluvias intensas ponen en jaque la movilidad en carreteras de Veracruz: advierten transportistas

Guadalupe Hernández – Punto Noticias

Orizaba, Ver. – Las intensas lluvias que se han registrado en el estado de Veracruz durante las últimas semanas han agudizado las afectaciones en distintos tramos carreteros, generando preocupación entre transportistas ante el deterioro creciente de la infraestructura y la falta de acciones preventivas.

Lauro Rincón Hernández, presidente nacional de la Federación Mexicana de Transporte (Fematrac), alertó que puntos clave como el Trébol Escamela–Ixtaczoquitlán, el tramo conocido como “Las Gemelas” rumbo a Nogales, y la autopista Tinaja–Cosamaloapan, presentan daños severos que comprometen la seguridad de los conductores.

“Estamos viendo cómo el agua no solo genera deslaves, sino también desgasta aceleradamente el asfalto. Estos tramos son altamente transitados y en muchos casos no tienen rutas alternas”, declaró el dirigente.

En la zona de Escamela, pese a que actualmente hay obras en marcha, aún no se ha informado oficialmente en qué consisten. Rincón Hernández presume que podrían estar relacionadas con la contención de taludes o corrección de filtraciones, aunque “todo se mantiene sin claridad por parte de las autoridades”.

El caso de la autopista Tinaja–Cosamaloapan es más delicado: al ser una región cruzada por diversos ríos, las crecidas constantes terminan por inundar la carpeta asfáltica, debilitando su base, que fue construida sobre rellenos no compactados adecuadamente. “Hay tramos donde el agua simplemente se apodera de la vía y el tránsito se detiene”, explicó.

Ante esta situación, lamentó que Caminos y Puentes Federales (Capufe) no esté implementando acciones preventivas. “Este es un problema que lleva años, pero lo siguen tratando como si fuera algo nuevo cada temporada”, expresó con preocupación.

Además de los daños estructurales, Rincón subrayó que la temporada de lluvias vuelve invisibles los baches, lo que representa un peligro adicional. “Un bache oculto puede dañar neumáticos, suspensión o rines. Solo cambiar una llanta puede costar más de 3 mil pesos”, advirtió.

El líder transportista recordó también los estragos que causó recientemente un derrumbe en el tramo hacia Maltrata, donde siguen los trabajos para retirar toneladas de lodo y rocas a la altura de La Estancia. “Esos deslizamientos pueden repetirse si no se da un mantenimiento adecuado en zonas de riesgo”.

Finalmente, comentó que en una reunión reciente con Capufe Puebla pidieron revisar las zonas donde la autopista corre junto a cerros. “Queremos evitar que un día haya una tragedia que pudo haberse prevenido”, concluyó.

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Mariana Gutierrez

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